La bohème es una de las óperas más populares, no tan solo de Puccini sino de todo el repertorio, con una música emocionante y una historia muy humana que la convierte en una vivencia conmovedora.
El Auditori de Cornellà sube su telón este domingo 27 de octubre a las 18h con un teatro atestado con todas las localidades agotadas desde hace semanas atrás, hecho que demuestra el interés del público hacia el género operístico y que llega gracias a la Fundación Ópera Catalunya que se constituye como el instrumento necesario para garantizar la continuidad y crecimiento del ciclo Ópera en Catalunya del que forma parte la ciudad de Cornellà.
Con el coro Amics de l’Òpera de Sabadell y la Orquestra Sinfònica del Vallès, el director Pau Monterde firma la nueva propuesta escénica de La bohème con Daniel Gil de Tejada, director musical de la Fundación y del coro Amics de la Ópera de Sabadell, asumiendo la batuta.
Ambientada en París en el siglo XIX, explica la vida de un grupo de bohemios pobres, que tienen que hacer de todo para salir adelante. El amor aparece y pasa a ser el centro de todo, con la pareja formada por Rodolfo, poeta, y Mimì, costurera. Amor a primera vista, lleno de ternura, que los protagonistas no saben muy bien cómo gestionar cuando una terrible enfermedad que la afecta a ella irrumpe en la relación. Al final, todo se redime y el amor se afianza con fuerza pero ya a las puertas de la muerte, demasiado tarde
Con La bohème, Puccini captura la belleza y la tristeza del amor joven y, a través de una melodía romántica y emocional con momentos tan conmovedores como la aria Che gelida manina, explora los temas de la pobreza y la muerte, pero también de la solidaridad.
Dividida en cuatro actos y con una duración final de 2h 50min, para el libreto, basado en la novela de Henri Murger Scènes de la vie de bohème, el compositor de contó con dos amigos suyos,
Giuseppe Giacosa y Luigi Illica, que trabajaron juntos por primera vez con esta ópera. Posteriormente también colaboraron en Tosca y a Madama Butterfly. La bohème se estrenó el 1 de febrero de 1896 a en el Teatro Reggio de Turín, la capital del Piamonte, con el legendario director de orquesta Arturo Toscanini.